jueves, 8 de mayo de 2008

CONFLICTO ÁRABE-ISRAELÍ: EL BNG, GÓMEZ VALADÉS Y BERTOLD BRECHT

Por L. Conde




Groucho Max decía que jamás pertenecería a un Club que le admitiera como socio. Conozco gallegos que votan al BNG (Bloque Nacionalista Galego) en las elecciones generales, jamás en las autonómicas o municipales. Saquen sus conclusiones.


Abel García López, concejal de Neda, abandonó ese partido, entre otras razones, cuando el BNG no condenó el Holocausto. Pedro Gómez Valadés es expulsado del BNG por presidir AGAI, una asociación que defiende el derecho de Israel a existir. ¿Podremos suponer que los que se quedan en el BNG están de acuerdo en no condenar el Holocausto y en que el Estado de Israel debe desaparecer? Seguramente no. Tal vez piensen que eso es algo que realmente no va con ellos y les compense seguir militando en un partido de esas características obviando ese pequeño detalle.


Ese pequeño detalle traerá otro y otro más y con un pequeño detalle ya es suficiente para abrir una grieta en el embalse, tarde o temprano reventará la presa y todo lo anegará, todo se cubrirá de ignominia y todos se afanarán en buscar excusas inútiles, cobardes. Entonces será demasiado tarde. Obviar ese pequeño detalle. Imagínense lo que significa pensar así. Qué coraza hay que tener. Qué excusas se pueden alegar. Qué código ético. Galiza Ceibe (Galicia Libre) (libre de judíos?)dicen aún algunas pintadas callejeras. Pero para que un país sea libre tiene que estar primero habitado por almas libres. Y las almas libres están vacías de todo prejuicio, siempre fruto de la ignorancia. ¿Habrá judíos entre los militantes del BNG?. Habrá descendientes de judíos sin que ellos mismos lo sepan?. Cuántos afiliados se apellidan Nieto, Méndez, Amigo, Oliveira…. Y tantos otros de origen sefardí que en algún momento de su historia familiar fueron olvidando su origen pero que les puedo asegurar que tarde o temprano volverá a emerger, tal vez no en esta generación pero sí en las venideras, un nieto quizá descubrirá algo en su forma de ser, de pensar, de sentir, y sin saber aún porqué se sentirá profundamente herido cuando difamen a Israel, cuando escuche conversaciones sobre esos “judíos de mierda” y no sabrá explicarse ese dolor y lo ocultará y hará como los otros. Pero su apellido es Amigo, Nieto, Prieto….. un día se entera de que es de origen sefardí y entonces lo entenderá todo, o no, o se volverá más cruel que Torquemada en su afán por ocultar su origen. Pero los ciudadanos israelíes no sólo son judíos, supongo que ya lo saben, son musulmanes, cristianos, ateos….blancos, negros… Todos con iguales deberes y derechos. Todos israelíes.


¿Es ético militar en un partido así? Y sin embargo, qué gran desilusión para los que se inscribieron en él pensando que podrían ser libres. Leyeron sus estatutos y los creyeron literalmente. Luego vieron como la teoría poco tenía que ver con la práctica. Dieron otra oportunidad a ese partido, y otra y otra. Pero un día escuchan que el Holocausto no debe ser condenado. Y ese partido en el que militan habla por ellos, les representa a ellos porque ellos delegaron en sus dirigentes una ideología con la que se creían identificados. Y se sienten estafados. Otro día ven que algunos de sus correligionarios alentados por algunos dirigentes aplauden el exterminio de Israel. Sí, el exterminio, porque que un Estado desaparezca de la faz de la tierra conlleva el exterminio, o acaso creen que un Estado desaparece por arte de magia, sin sangre, sin que nadie resulte dañado?. Y ahora, cómo dar otra oportunidad a ese partido, cómo sentirse representado por él. Qué hacer con los ideales que depositaron en él. Piensan tal vez que pueden hacerles recapacitar. No se resignan a ser defraudados de manera tan vil. Luchan por aquellos ideales que propugnaban y que les hicieron afiliarse. Galiza Ceibe. Y yo? Yo soy gallego, y qué hay de lo mío. Cómo sentirme libre entre esta cerrazón. Qué hay de mi esperanza. Y lo abandonan antes de que la ética les abandone a ellos.


Otros no se resignan y piensan que pueden luchar contra ese obstinado prejuicio. Tal vez pregunten a sus correligionarios, y tú, porqué crees que debe desaparecer Israel? Porqué no condenas el Holocausto? No ves que un día podría tocarte a ti, a tu familia, a tus hijos?. Israel es un Estado Imperialista, le responderán repitiendo las consignas sin saber y sin querer saber por sí mismos. Repiten lo que sus dirigentes. Han delegado su ética en ellos. Ya no son nadie. Los dirigentes opinan, sienten, hablan por ellos. Es cómodo, tal vez. Pero es como estar muerto. Puede que Pedro Gómez Valadés les hable del fraude que tiene que asumir en soledad. Puede que reciba mil y una muestras de apoyo de sus compañeros de partido. Sólo eso, palabras. Pero qué pasaría si todos, TODOS, los que no delegan su moral en cuestiones que son de lesa humanidad, indelegables, se dieran de baja en un partido que es capaz de algo así? Eso tal vez haría que sus dirigentes volvieran a la literalidad de los estatutos que hicieron posible que personas de bien se afiliaran en aquel tiempo, antes de que cayeran en esta ignominia. Porque esta vileza arrastra consigo a todos los militantes que todavía forman parte de un partido así. Un nazi afiliado a un partido nazi no tiene excusa. La gente sabe que si está en ese partido es porque acepta esa forma de pensar. Abel García López y Pedro Gómez Valades no lo son. Uno se fue. El otro no se resigna a creer que pudieron estafarle el alma y quiere retarlos a un duelo que ojalá gane. Por él y por el partido en el que depositó su afán. Pero, qué hay de los otros. Los que guardan silencio. Recordaré otra vez los versos de Bertold Brecht:


Primero vinieron a por los negros

Y yo no los defendí porque no era negro

Después vinieron a por los judíos

Y yo no los defendí porque no era judío.

Entonces vinieron a por los católicos

Y yo no los defendí porque no era católico.

Finalmente vinieron a por mí

Y para entonces ya no quedaba nadie para defenderme.


Pueden apoyar la causa palestina, están en su derecho, pero eso no tiene que ver con la desaparición de Israel. No confundan las cosas.


Hoy es Yom Hatzmaut. Se cumplen 60 años del Estado de Israel. No desaparecerá. Hay personas como Pedro Gómez-Valadés y Abel García López que creen en la Democracia y en el Estado de Derecho y que le hacen frente a partidos que la propugnan sobre los papeles pero que no la amparan con sus hechos. Qué magníficos ciudadanos si tuvieran dignos dirigentes.


Shalom.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Todáh Luísa. Grazas e un bico desde Vigo. Pedro

Anónimo dijo...

Grazas polas túas letras, fai un tempo que sinto o que escribes e hoxe antes de atoparme contigo chamei para preguntar como darme de baixa na militancia do BNG. Vivín durante 25 anos no Pais Vasco, nunca calei e agora levo un tempo "calada", fai moito tempo me fixen unha promesa que era a de non colaborar en ningún grado con calquera cousa que apoiara a ETA, o silencio que tiven despois de descubrir os pensamentos dos cachorros do BNG fixo que dalgún xeito colaborara. Decir que me estafaroan a alma, que me enganaron e pouco para saber como me sinto pero xa retomei forzas do fiasco que levei. Son unha militante de base, pero esto xa esta a piques de rematar. Grazas de novo por facerme ver que aínda hai persoas que pensan e sinten coma mín. Son galega amo o meu país, a miña cultura a miña tradición pero non creo que valga a pena unha ideoloxía que estea a favor de que se derrame unha soa gota do sangue, dende este intre xa non merece a pena, é unha vágoa. pos as túas esperanzas nunhas persoas, pensas que loitas polo ben de todos e atopaste cá utilización e os enganos. Creo na igualdade de todos e que non hai uns millores ca outros só temos aquelo que nos diferencia e eso é o que temos que aproveitar, aprender para millorar as nosas deficiencias, pero ademais temos aquelo que nos fai iguales que é ser persoas o respeto pola diferencia e por aquelo que nos fai ser iguais, a vida o dereito a vivir e a ser libres dentro do respeto. Falan de democracia e cando dis algo que non vai polo rego que eles queren rematou a liberdade que pensaba que tiñas, a liberdade de pensar, de falar e de facer.