domingo, 31 de mayo de 2009

LA LUJURIA DE LA CUADRATURA DEL CIRCULO.


Por L. Conde


No sé para qué compro los periódicos el domingo. Menos mal que traen sudokus. En El País escribe Rafael Sánchez Ferlosio, aquél que escribió “Mientras no cambien los dioses nada ha cambiado” y que leí en mi etapa de Neruda y Aute (no me explico como me llegó a gustar este chico siempre tan alegre). Este domingo me lo vuelvo a encontrar en la página 13 con “La lujuria de los bombarderos”, sobre el llamado conflicto árabe-israelí, claro. Y en la página 35 está Mario Vargas Llosa con “La cuadratura del círculo” sobre el mismo tema. Ambos pontifican, ofrecen soluciones, sed buenos… todo eso.

Don Rafael y Don Mario me hicieron pasar muy buenos momentos pero ahora tengo que hacer un gran esfuerzo para desligar su literatura de cualquier otra circunstancia. Afortunadamente no conocí a Cervantes, que a lo peor era un memo, y puedo disfrutarle sin miedo. En literatura y en el resto de las artes no hay como morirse. Fíjense ahora en Antonio Gala, quién va a desligar sus obras (a quienes les guste) de las huevadas que dijo tan melifluamente. Ah, el negocio de los pacifistas, cómo rentúa. Siempre me pregunto qué haría esta gente si atacaran a su pueblo, a su madre, a sus hijos…posiblemente ante esa situación límite harían lo que Israel: defenderse. O no, entregarían a sus seres queridos, se rendirían sin condiciones para tener la fiesta en paz, pondrían lo otra mejilla, se pasarían al otro bando…. Y para todas esas posibilidades encontrarían una explicación y a ser posible una “coartada moral”.

Pero las explicaciones ya se sabe lo que son. Esta explicación le va muy bien y ya no miro más. Es como cuando dejamos o nos dejan los novios/as, que algunos imbéciles van a pedir “explicaciones” y se las dan, por supuesto. Y por supuesto le dan una que quede bien, que no ofenda, en caso de elegancia intrínseca del abandonador, o que le deje el ego irrecuperable en caso de estar hasta las narices y el otro/a sin enterarse. En cualquier caso el que da la explicación con cara de circunstancias, te mereces algo mejor, soy poco para tí y esas zarandajas, y el que la escucha necesitando creérsela con ojos acuosos, juegan un rol teatral estupendo. Qué le voy a decir, que encontré a otra/o que me mola más?, o que me resulta tan familiar que esto nuestro ya parece más un incesto?. Pues quedo bien y aquí paz y allá gloria, y ya sabes que puedes contar conmigo siempre (y un huevo). Y cúidate
(porque yo ya no te voy a cuidar).

Pues así con todo. Esta gente habla y habla y claro, como en el caso de D. Mario (no sé si D. Rafael también) tienen un poder adquisitivo enorme, a Vargas Llosa ya le viene de familia y esta gente no vive en Horcasitas, no, vive en mansiones o pisos en la “parte alta” de las ciudades, con su seguridad particular en algunos casos porque suelen tener más de una casa y vivir en más de un país, según la temporada.
Pues vivan ustedes en Sderot a ver si siguen pensando igual.
Shalom.

2 comentarios:

Berobreo dijo...

Franca y demoledora.

Yo no me molesto ni en leer la prensa, a no ser la que acompaña al café con leche, ni en comprarla (libros y revistas más valiosos hay).

Un saludo.

IV REICH dijo...

Estoy un poco cansado de estos politiquillos Pseudo-intelectuales,que se creen que estan por encima del bien y del mal,y en el fondo son uños puñeteros hipocritas¡¡